Jos� Ignacio

Oleo sobre lienzo

Aunque crea en diferentes disciplinas es en el dibujo donde Augusto Carrillo alcanza sus mayores cotas de s�ntesis y de elaboraci�n de su obra. 
Sus tem�ticas son variadas, desde objetos, pasando por paisajes con figuras a la figura femenina como protagonista de sus desnudos. 
Un elemento en com�n une todas las obras de esta disciplina: la linealidad y la s�ntesis. Augusto Carrillo elimina todo lo superfluo y se concentra en la m�xima expresi�n con el m�nimo de recursos. 
Su dibujo est� muy pensado, en el sentido de que no es un dibujo que salga a la primera, sino que se produce a partir de postulados creativos en los que va descartando, en un proceso continuo, elementos que solo transgreden pero no ayudan ni complementan. 
El resultado final es una producci�n, a partir de la cual, todo est� en armon�a con la realidad de lo vivido.    Es decir que su obra surge de la constataci�n exterior, para darle una mayor capacidad de representaci�n y simbolismo cuando plasma todo aquello que le interesa en la disciplina de dibujo. 
Capta la tem�tica de forma lateral, como si fuera un fotograma de una pel�cula. Su m�rito estriba en su eficiente t�cnica, en la que emplea el conocimiento de la composici�n y de la perspectiva. 
Su disciplina t�cnica se basa en la observaci�n, pero, tambi�n, en el caso concreto del artista argentino, se fundamenta en la elaboraci�n sustancial de la idea. Es decir que lo que, en apariencia, es, por ejemplo, una bicicleta, su forma de ubicarla, como est� orientada, el gesto del manillar, la ausencia de paisaje, la nula presencia de elementos que complementen el entorno, hace que la obra en cuesti�n tenga una capacidad simbolista importante, convirtiendo la simple bicicleta en una expresi�n de alegr�a contenida. Convierte un elemento concreto en una sensaci�n visual. 
De igual modo sucede con su desnudo femenino, estilizado, de rasgos est�ticos, de pose tranquila, que emana sensualidad por los cuatro poros. O el paisaje con el mexicano incorporado, descansando, produciendo al espectador una sensaci�n de quietud. Est� claro que es un gran comunicador. Y lo hace con naturalidad, con eficiencia, sin abusar de elementos y tampoco de efectos. Ah� es donde radica la grandeza de este artista que domina el dibujo como si fuera una religi�n.
Joan Llu�s Montan�
De la Asociaci�n Internacional de Cr�ticos de Arte 
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Puerto

Oleo sobre lienzo

Barrancas rosadas

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Rocas

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Espejismo

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